Está demostrado que uno de los muchos beneficios que tiene realizar yoga de forma continuada es que nos hace mejorar nuestro aspecto físico.
Gracias a las posturas de yoga, a la atención a la respiración; oxigenamos, revitalizamos y regeneramos todo el organismo a nivel celular, haciéndolo más fuerte y resistente a las agresiones externas e internas.


Cuando practicamos yoga de forma continuada generamos más endorfinas (hormona de la felicidad), lo que provoca la disminución automática de los niveles de estrés y facilita que nos sintamos más felices y relajados, esto se refleja en nuestra cara (entrecejo, mandíbula, alrededor de los ojos) disminuyendo las arrugas y aportando mayor luminosidad en nuestro rostro.


Mediante una respiración consciente y completa, el yoga proporciona oxígeno suficiente para el funcionamiento correcto y eficiente de todas las células del cuerpo. Una práctica regular de yoga activa todos los sistemas: circulatorio, inmunológico, digestivo, etc., lo que permite depurar nuestro organismo y eliminar todo lo que no necesita, fomentando el brillo tanto de nuestra piel como de nuestro cabello.


Respirar es el acto que permite oxigenarnos y llenarnos de vida. A través de una respiración consciente, mejora la fuerzo física, la resistencia contra enfermedades y cansancio, los estado de ánimo decaídos, así como las mentes dispersas y aceleradas y todo esto se refleja en nuestro exterior.


Una sesión de yoga paulatinamente te hará rejuvenecer porque con sus posturas se activará la circulación sanguínea, tonifican los músculos y ayudas a eliminar toxinas, todo esto acompañado de una respiración profunda y consciente. Precisamente, este último punto es el que diferencia el yoga de cualquier gimnasia o técnica. Es a través de la respiración que se consigue la oxigenación de las células y serenar la mente.


Por lo tanto, el yoga hace que tengas muchas menos arrugas, la piel expresa nuestra apariencia y nuestra edad y la práctica regular de asanas y pranayamas son nuestros aliados para conseguirlo.


El yoga regula la expresión facial; los practicantes regulares de yoga expresan en su cara menos emociones negativas antes situaciones negativas. El yoga disminuye la respuesta del cuerpo ante emociones negativas o estrés como la aparición de sudor, taquicardia, respiración rápida….

Otro de los beneficios del yoga en la piel puede encontrarse en el tratamiento del acné. El acné frecuente en adolescentes, muchas veces se deben a conductas repetitivas centradas en el cuerpo y debajo de las cuales encontramos ansiedad o procesos de adaptación. La práctica de yoga ha demostrado añadir beneficios a los tratamientos farmacológicos y psicológicos de estas afecciones.
A qué estás esperando, aunque te parezca increíble con el yoga conseguirás estar mucho más guap@.